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Description
En esta obra podemos observar un cuadro origami, hecho con telas de origen japonés de vistosos colores cálidos y formas geométricas dobladas, donde se aúnan la belleza oriental con el colorido occidental. Una intrínseca obra que combina la sencillez con la abundancia. Esta obra entremezcla fondos y flores de distintos colores. Los crisantemos de color blanco son la representación de la flor de oro, en japón el crisantemo se asocia a la longevidad, el rejuvenecimiento, la alegría, y la vida eterna. El color blanco significa el poder del nuevo comienzo, la limpieza, la inocencia, la reflexión, la apertura a la creatividad, la imparcialidad, la capacidad de crecimiento y la paz. En el centro del cuadro podemos visualizar un lirio de color amarillo y rojo que representan la dualidad, la flor del lirio representa la gratitud y la alegría, el amor y la seducción. El amarillo, que simboliza la abundancia de un nuevo comienzo y riqueza que se eleva desde la introspección del observador. Mientras que el color rojo representa, la valentía, la fuerza, la pasión, el amor, la iniciativa que necesitamos para progresar en nuestro camino hacia el crecimiento. Los tonos de color azul significan la libertad, la armonía, la lealtad, la energía y el regalo del ahora. Por último los tonos verdes del cuadro representan la calma interior, y el equilibrio emocional.

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En esta obra podemos observar un cuadro origami, hecho con telas de origen japonés de vistosos colores cálidos y formas geométricas dobladas, donde se aúnan la belleza oriental con el colorido occidental. Una intrínseca obra que combina la sencillez con la abundancia. Esta obra entremezcla fondos y flores de distintos colores. Los crisantemos de color blanco son la representación de la flor de oro, en japón el crisantemo se asocia a la longevidad, el rejuvenecimiento, la alegría, y la vida eterna. El color blanco significa el poder del nuevo comienzo, la limpieza, la inocencia, la reflexión, la apertura a la creatividad, la imparcialidad, la capacidad de crecimiento y la paz. En el centro del cuadro podemos visualizar un lirio de color amarillo y rojo que representan la dualidad, la flor del lirio representa la gratitud y la alegría, el amor y la seducción. El amarillo, que simboliza la abundancia de un nuevo comienzo y riqueza que se eleva desde la introspección del observador. Mientras que el color rojo representa, la valentía, la fuerza, la pasión, el amor, la iniciativa que necesitamos para progresar en nuestro camino hacia el crecimiento. Los tonos de color azul significan la libertad, la armonía, la lealtad, la energía y el regalo del ahora. Por último los tonos verdes del cuadro representan la calma interior, y el equilibrio emocional.