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Aki y Mia se encontraban realizando las compras previas a la primavera, especialmente los conjuntos necesarios para esa época; ambos disfrutaban de su compañía entre pequeñas bromas y comentarios propios de los jóvenes; o al menos eso hacían hasta que unas misteriosas tabletas aparecieron como si del mismísimo cielo hubiesen caído.
En primer instante la pequeña del dúo se emociono con tales novedosos aparatos, mas el mayor lucia claramente como si no aprobara aquellos aparatos, los rostros de ambos jóvenes eran completamente distintos en esos momentos, ella ilusionada, el claramente fastidiado.
Mia finalmente arrastro al joven hasta frente a una de las tabletas “¡Me encantaría verte de castaño, vamos a probar! OH OH ¿Qué tal de peliverde? Oh mi Arceus, esto será divertido~” Exclamaba la joven con alegría mientras se disponía a colocarle la tableta en las manos al muchacho, mas este a pesar de estarse riendo a causa de la emoción de la chica, estaba claramente reacio a utilizar aquello “Mia, me como me veo actualmente aunque no lo parezca” fue lo que respondió el rubio, riendo suavemente al final de la oración, más esto no desalentó a la alegre muchacha “Aki, ya sé que eres divinamente lindo, pero seria muy divertido verte con el cabello no lo sé…¡Arcoíris!” exclamo el final como si de una revelación se tratase, pero no hay que mal interpretar las acciones de la joven, a ella le encanta la apariencia de Aki, cada vez que le ve pareciera ante sus ojos que ve algún ángel o algún modelo, incluso se planteaba hacer alguna sesión de fotos con él y algunos cambios de ropa, pero aquello sería un tema aparte.
“Entonces veamos como TU” recalco el joven tomando la Tablet y colocándola frente a ella “Te verías con el cabello azul y algunas pecas” comento entonces tocando la pantalla de la Tablet para colocarle aquellas características a la joven, la cual estaba visiblemente encantada con la idea.
“¡Pon el color de ojos más llamativo y genial que veas!” exclamo entre pequeñas risas mientras acomodaba sus anteojos sobre el puente de su nariz. El joven procedió entonces a buscar entre los colores que había en aquella tableta hasta tocar entonces uno que le pareció el adecuado “¡Amarillo!” Aki ya no lucia tan renuente a jugar con la tableta, o bueno, hasta que esta se apagó y comenzó a levitar, sacando un chillido de espanto de los labios del muchacho, aunque no solo de él, de igual forma Mia pegaría un grito de susto, mirando con una mezcla de temor y curiosidad como el aparato se elevaba y era dirigido hacia el puente, creando junto con las demás una sola y enorme pantalla, donde pronto la figura de un hombre apareció.
Aki por su parte se coloco delante de la pelirroja en un acto de protección, casi como un escudo humano; Mia se escondería tras el joven, sacando un poco la cabeza para poder observar lo que ocurría, alerta de que nada le pasase a su amigo.
“Aki… ¿Qué esta pasando?” murmuro cuando el discurso iba medianamente avanzado.
“No lo sé…Pero no me gusta.” De igual forma murmuro el joven en respuesta, con el seño fruncido, pero mas relajado al no ver una amenaza.
Así pasaron entonces los próximos minutos, Aki en silencio, nuevamente fastidiado, casi podría decirse que estaba molesto; mientras que Mia lucia confundida, escuchando con curiosidad y atención lo que aquel hombre decía, de alguna forma, atenta a sus palabras.
El joven estaba básicamente molesto por lo que a él le parecía una sarta de mentiras y delirios de algún hombre con problemas, mas las palabras de aquel sujeto resonaban en la cabeza de la pelirroja “ser perfectos, como siempre quisieron o quizás para quienes quisieron…” Para quienes quisieron… Mia no dejaba de imaginar con respecto a esas palabras, ser ideal para quien toco su corazón, no sonaba como algo malo realmente.
Para cuando el discurso había acabado, el rubio estaría más calmado, prácticamente feliz de que acabo aquella palabrería barata. Pero Mia no, aun no sale de sus pensamientos, imaginando como aquella persona podría amarle si fuese ideal. Finalmente, llegaron hasta ellos ofreciéndoles aquellos tarros, Aki ni siquiera tuvo que negarse, porque su Xatu salió rápidamente de su pokeball, haciendo una barrera para evitar que tomase aquello.
Mas Mia aun permanecía ida, tanto que ni siquiera se dio cuenta de cuando extendió su mano en busca de aquel tarro que prometía ser milagroso, mas en segundos que parecieron eternos para la joven, tomo su decisión, termino bajando la mano y negando suavemente con la cabeza; mientras un muy orgulloso Aki le miraba feliz de que no hubiera caído en las garras de lo que para el eran patrañas.
“¿No lo vas a aceptar?” aprovecho de preguntarle, curioso, pero manteniendo un tono de cierta felicidad en la voz.
“No es necesario, Creo… que estaré bien sin eso” Seria la respuesta de la joven, mientras alzaría su vista hacia el joven, sonriéndole con dulzura.
“Eso es verdad” seria su respuesta, acompañada de una sonrisa, para luego por sorpresa colocar sus manos en las mejillas de la joven y empezar a pellizcarlas “¡Porque tú ya eres tremendamente adorable!” respondería para luego soltarle entre risas.
“¿Eh? ¡Aki!” exclamaría entre risas, sintiendo sus mejillas calentarse tanto por el cumplido como por la sensación de cosquilleo gracias a los pellizcos.
Así entonces ambos jóvenes se alejarían del lugar, volviendo a su plática anterior.
Dibujo&Aki
Texto&Mia
Recompensas:
- 10.000 EXP
- $ 12.000
- Ultraball x 20
- Sanaball x 10
- Gema Psíquica x5
- Escama Corazón x 6
- Uno de los pokémon que elija aprenderá un movimiento huevo.
- +21 niveles a repartir
LUV U BROTHA