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Description

Francisco Ibáñez Talavera falleció del día 15 de julio. Es un dibujante de tebeos español detrás de obras maestras del humor como Mortadelo y Filemón, Rompetechos, El Botones Sacarino y otras tantas series.

Aunque de todas ellas Mortadelo es la más famosa, lo que llevó a que pasasen de estar en episodios cortos de una o 2 páginas a aventuras de más de 40 páginas.

En lo personal me gustan otras de sus historias. De pequeño las aventuras de los protagonistas de la TIA me daban un mal rollo. No soportaba que los protagonistas tuviesen que cumplir misiones con recursos tecnológicos limitados y que unos supuestos representantes de la ley tuviesen momentos de bancarrota moral.

Recordemos que el Súper tiene que estar disciplinando a sus subordinados para ponerlos firmes en la medida de lo posible, algo que en la mayoría de las historietas se consideraría propio de villanos, al punto que para mí un villano que disciplina a sus subordínanos me recuerda al dicho "quien combata monstruos, que se cuide de no convertirse en uno".

Pero al hacerte mayor te das cuenta de que ese es el punto: La TIA y sus miembros es una parodia que no trata a los servicios de seguridad españoles con buenos ojos, por lo que es normal que la TIA funcione como si estuviera sacada de un mercadillo chino. Básicamente, al crecer me di cuenta de que me estaba tomando en serio una comedia.

Me pregunto que será de las franquicias de Ibáñez ahora que ha muerto el autor. Seguramente otros le tomarán el relevo, pero ya no va a ser del todo lo mismo.

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Francisco Ibáñez Talavera falleció del día 15 de julio. Es un dibujante de tebeos español detrás de obras maestras del humor como Mortadelo y Filemón, Rompetechos, El Botones Sacarino y otras tantas series.

Aunque de todas ellas Mortadelo es la más famosa, lo que llevó a que pasasen de estar en episodios cortos de una o 2 páginas a aventuras de más de 40 páginas.

En lo personal me gustan otras de sus historias. De pequeño las aventuras de los protagonistas de la TIA me daban un mal rollo. No soportaba que los protagonistas tuviesen que cumplir misiones con recursos tecnológicos limitados y que unos supuestos representantes de la ley tuviesen momentos de bancarrota moral.

Recordemos que el Súper tiene que estar disciplinando a sus subordinados para ponerlos firmes en la medida de lo posible, algo que en la mayoría de las historietas se consideraría propio de villanos, al punto que para mí un villano que disciplina a sus subordínanos me recuerda al dicho "quien combata monstruos, que se cuide de no convertirse en uno".

Pero al hacerte mayor te das cuenta de que ese es el punto: La TIA y sus miembros es una parodia que no trata a los servicios de seguridad españoles con buenos ojos, por lo que es normal que la TIA funcione como si estuviera sacada de un mercadillo chino. Básicamente, al crecer me di cuenta de que me estaba tomando en serio una comedia.

Me pregunto que será de las franquicias de Ibáñez ahora que ha muerto el autor. Seguramente otros le tomarán el relevo, pero ya no va a ser del todo lo mismo.