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Description
Nombre: Pequeña Gorrión - Zarpa de Gorrión - Vuelo de Gorrión - Vuelo Perdido - Estrella Perdida
Rango: Líder
Clan: del Camino
Aprendiz: –

Físico: De contextura delgada y musculatura bien formada, posee una figura esbelta que logra hacerle parecer más larga de lo que realmente es, al igual que un porte elegante.
Razas: Burmés, Gato del Himalaya, Balinés
Aroma: Perdida cuenta con una distinguible esencia dulce y cítrica impregnada en su pelaje.
Voz: TBA

Sexo: Femenino
Género: Femenino
Orientación Sexual: Bisexual [80% Hembras - 20% Machos]
Orientación Romántica: Homoromántica
Interés: –
Por favor, sé mi guía de aquí al clan estelar. :

TBA

Si pudieras conservar la distancia te lo agradecería mucho. :

TBA
Estadísticas:

Velocidad: 4/5
Agilidad: 4/5
Táctica: 1/5
Fuerza: 3/5
Flexibilidad: 3/5
Olfato: 3/5
Nado: 0/5
Caza: 3/5
Pesca: 0/5
Trepar: 4/5
Campo de visión: 3/5
Liderazgo: 3/5
Adaptabilidad: 5/5
Memoria: 1/5
Reconciliar: 3/5
Conciencia/culpa: 2/5
Concentración: 5/5
Acecho: 3/5
Precisión: 4/5
Salto: 3/5
Aguante/Defensa: 4/5
Fortaleza Mental: 2/5

Historia:
Cachorra:
Naciste en terrenos lejanos al que ahora perteneces, dentro de una comunidad desconocida para ti en el presente y fruto del amor prohibido que tus padres llevaban a costa de pertenecer a clanes distintos. Tu concepción y la de tus hermanos fue un secreto, al igual que el verdadero origen de tu nacimiento. Bruma Lunar, tu madre, y Tallo Partido, tu padre, trabajaron duro en pos de no ser descubiertos, tanto así que recurrieron a la ayuda de Cielo, guerrero de renombre y compañero de Clan de Bruma Lunar, quien aceptó hacerse pasar por tu padre legítimo en pos de proteger a sus amigos.

Tuviste entonces una infancia protegida junto a tus dos hermanas y hermano, sin saber lo que el destino tenía planeado para ti.

Aprendiz:
Cumpliste 6 Lunas y fuiste nombrada como Zarpa de Gorrión, tus colores marrones y tu felpudo pelaje hacían recordar fácilmente al simpático ave.
Nombraría a tu mentor de no ser por su carencia de importancia, ni siquiera tú pudiste conocerlo en profundidad, pues a la brevedad del comienzo de tu entrenamiento fue que ocurrió.

El hecho que marca tu vida hasta el día de hoy, metafórica y literalmente.

Todo comenzó con una llovizna mañanera el día de tu segunda sesión de entrenamiento, tu mentor creyó buena idea aprovechar el acontecimiento como una prueba aún más difícil para ti, pensó que te haría fuerte, y aportaría nuevos conocimientos a tus capacidades, mas no contaba con lo que pasaría más tarde ese día. La llovizna se convirtió en lluvia, la lluvia en tormenta y la tormenta en diluvio, pronto el suelo que una vez fue de sólida tierra firme se convirtió en el fango más molesto, deformándose y finalmente desapareciendo bajo capas y capas de agua. El campamento y sus zonas aledañas se habían inundado por completo para la puesta de sol, el caos invadió todos los clanes ese día, el río creció a tal punto, que las corrientes ahora atravesaban las madrigueras y guaridas que con tanto esfuerzo habían sido construidas en el pasado. Maullidos desgarradores y desesperados de mininos arrastrados por el agua invadieron aquella trágica tarde, gritos ahogados y chapoteos tanto de gotas pesadas como zarpas pataleando en un esfuerzo vano por salvarse del destino cruel que el agua suponía quedaron grabados en tu memoria incluso hasta el día de hoy. No pudiste ir en busca de tu madre, por supuesto, ni viste a tus hermanos otra vez, el último contacto que tuviste antes del suceso fue con tu mentor, quien desesperadamente incó sus garras en tu piel en un intento vano por mantenerte a salvo.

Pero fuiste alejada de tu hogar por las corrientes más feroces, sufriendo probablemente el suceso más traumático de toda tu corta vida... El cual afortunadamente no recordarás. No está de más aclarar que sufriste lesiones incontables, desgarrada por espinas y golpeada por firmes rocas que no se inmutaban ante el paso del agua, sufriste al llegar el anochecer una contusión en la cabeza de tal magnitud que quedaste inconsciente al instante.

Tu cuerpo inherte fue transportado, para tu suerte, por los ahora mansos vaivenes que el agua ofrecía tras haberse calmado el diluvio, siendo ahora decisión del río el qué sería de ti.

???:
Quien sabe si fueron horas, días o semanas. Despertaste confundida y asustada en el medio de un claro que desconocías por completo, rodeada de cerros y bosques. Todo era nuevo para ti otra vez, mas era diferente, una sensación incómoda, pronto caiste en cuenta que no lograbas recopilar absolutamente nada de lo anteriormente ocurrido.
Ni tu nombre, ni tu edad, ni tus padres, ni amigos, la angustia te consumió pero el hambre te empujó a seguir a través de éstas tierras desconocidas que ahora se ponían a tu disposición para ser exploradas.

Es entonces el comienzo de tu nueva vida.

Se puede decir que te instruiste sola y con éxito, superaste la soledad al instante en que manchaste de sangre tu hocico y calmaste tu apetito. Las lunas dentro del aislamiento en el claro terminaron forjando en ti una personalidad fuerte y feroz, mas el anhelo por la compañía de alguien más punzaba cada día a todas horas, siendo algo que nadie podría enseñarte a superar.

Sin saberlo habías cumplido tus 14 lunas y por ende tu entrenamiento como guerrera.

Guerrera:
Fue una luna más tarde que decidiste expandir tus horizontes, los bosques, el cerro y lo que hubiera más allá permanecía desconocido para ti, cosa que no duraría por mucho.
Comenzaste tu viaje con timidez y precaución, pero por más pulcros que fuesen tus pasos fuiste sorprendida más de una vez por animales locales y sonidos inesperados.
Éste viaje tuyo es una de las pocas cosas que aún recuerdas, y agradeces con todo tu ser, pues sería parte del gran cambio que estaba tomando lugar en tu vida

A tus 17 lunas tuviste tu primer encuentro en mucho tiempo con otro felino, digamos que no muy amigable. Resulta que inconscientemente habías cometido el gravísimo error de entrar en territorio prohibido... Pero por qué? El gato que te confrontó pronto aclaró tus dudas al arrastrarte a lo más profundo del campamento, un clan funcionaba en las cercanías, y tú estabas robando sus presas día a día.

Una vez dentro fuiste bombardeada por brillantes ojos prejuiciosos pertenecientes a felinos que probablemente pensaban en la forma más retorcida de hacer justicia por mano propia, mas no tenían permitido llevar a cabo sus pensamientos, serías juzgada por el líder del clan y su lugarteniente. Claro que no sabías nada de esto, pues hacía mucho habías olvidado lo que era pertenecer a un Clan.

Fue evidente entonces para todos los presentes en el juicio que tu ignorancia e inconsciencia te hacían inocente, o al menos así lo decidió el líder, Estrella del Sur en ese entonces. Gracias a tu estado confuso se te fue dada una segunda oportunidad, únicamente como servidora al Clan del Camino.

Pero a pesar de tu forzoso comienzo como miembro de la comunidad, haces tu mejor esfuerzo para que las miradas intrusas comiencen a familiarizarse con tu presencia.

Fuiste en esta etapa de tu vida, nombrada como "Vuelo Perdido" debido a tu confuso pasado.

Líder:
Una vez aceptada en el clan y ganada su confianza, tu desenvoltura con tus pares pronto evolucionó. Aprendiste a ser amable y ver por el otro, dejaste el egoísmo en tu pasado e hiciste amigos donde jamás te habrías imaginado. Tu desempeño fue tal, que no tardaste en escalar rangos a medida que tu edad avanzaba y sin habértelo esperado llegaste a ocupar el puesto de Lugarteniente en un tiempo envidiable.

Mas estabas feliz en tu posición, el trabajo que desempeñabas era digno de orgullo para la mayoría y celos para algunos. Rogabas entonces que aquellas épocas no acabasen, pero así lo hicieron de todas formas.

Es inútil detallar los hechos que te guiaron ciegamente a donde te encuentras ahora, Estrella del Sur se retira debido a su avanzada edad, y es entonces cuando llega tu ascendencia, tu legado.

Tomas el Liderazgo del clan con 26 lunas recién cumplidas, y aún sigues en el cargo, desempeñándolo con esfuerzo hasta el día de hoy.

Personalidad:

Comprensible:
Dispuesta:
Leal:
Justa:

Indiferente:
Seria:

Rencorosa:
Paranoica:
Fácil de ofender:

Description
Nombre: Pequeña Gorrión - Zarpa de Gorrión - Vuelo de Gorrión - Vuelo Perdido - Estrella Perdida
Rango: Líder
Clan: del Camino
Aprendiz: –

Físico: De contextura delgada y musculatura bien formada, posee una figura esbelta que logra hacerle parecer más larga de lo que realmente es, al igual que un porte elegante.
Razas: Burmés, Gato del Himalaya, Balinés
Aroma: Perdida cuenta con una distinguible esencia dulce y cítrica impregnada en su pelaje.
Voz: TBA

Sexo: Femenino
Género: Femenino
Orientación Sexual: Bisexual [80% Hembras - 20% Machos]
Orientación Romántica: Homoromántica
Interés: –
Por favor, sé mi guía de aquí al clan estelar. :

TBA

Si pudieras conservar la distancia te lo agradecería mucho. :

TBA
Estadísticas:

Velocidad: 4/5
Agilidad: 4/5
Táctica: 1/5
Fuerza: 3/5
Flexibilidad: 3/5
Olfato: 3/5
Nado: 0/5
Caza: 3/5
Pesca: 0/5
Trepar: 4/5
Campo de visión: 3/5
Liderazgo: 3/5
Adaptabilidad: 5/5
Memoria: 1/5
Reconciliar: 3/5
Conciencia/culpa: 2/5
Concentración: 5/5
Acecho: 3/5
Precisión: 4/5
Salto: 3/5
Aguante/Defensa: 4/5
Fortaleza Mental: 2/5

Historia:
Cachorra:
Naciste en terrenos lejanos al que ahora perteneces, dentro de una comunidad desconocida para ti en el presente y fruto del amor prohibido que tus padres llevaban a costa de pertenecer a clanes distintos. Tu concepción y la de tus hermanos fue un secreto, al igual que el verdadero origen de tu nacimiento. Bruma Lunar, tu madre, y Tallo Partido, tu padre, trabajaron duro en pos de no ser descubiertos, tanto así que recurrieron a la ayuda de Cielo, guerrero de renombre y compañero de Clan de Bruma Lunar, quien aceptó hacerse pasar por tu padre legítimo en pos de proteger a sus amigos.

Tuviste entonces una infancia protegida junto a tus dos hermanas y hermano, sin saber lo que el destino tenía planeado para ti.

Aprendiz:
Cumpliste 6 Lunas y fuiste nombrada como Zarpa de Gorrión, tus colores marrones y tu felpudo pelaje hacían recordar fácilmente al simpático ave.
Nombraría a tu mentor de no ser por su carencia de importancia, ni siquiera tú pudiste conocerlo en profundidad, pues a la brevedad del comienzo de tu entrenamiento fue que ocurrió.

El hecho que marca tu vida hasta el día de hoy, metafórica y literalmente.

Todo comenzó con una llovizna mañanera el día de tu segunda sesión de entrenamiento, tu mentor creyó buena idea aprovechar el acontecimiento como una prueba aún más difícil para ti, pensó que te haría fuerte, y aportaría nuevos conocimientos a tus capacidades, mas no contaba con lo que pasaría más tarde ese día. La llovizna se convirtió en lluvia, la lluvia en tormenta y la tormenta en diluvio, pronto el suelo que una vez fue de sólida tierra firme se convirtió en el fango más molesto, deformándose y finalmente desapareciendo bajo capas y capas de agua. El campamento y sus zonas aledañas se habían inundado por completo para la puesta de sol, el caos invadió todos los clanes ese día, el río creció a tal punto, que las corrientes ahora atravesaban las madrigueras y guaridas que con tanto esfuerzo habían sido construidas en el pasado. Maullidos desgarradores y desesperados de mininos arrastrados por el agua invadieron aquella trágica tarde, gritos ahogados y chapoteos tanto de gotas pesadas como zarpas pataleando en un esfuerzo vano por salvarse del destino cruel que el agua suponía quedaron grabados en tu memoria incluso hasta el día de hoy. No pudiste ir en busca de tu madre, por supuesto, ni viste a tus hermanos otra vez, el último contacto que tuviste antes del suceso fue con tu mentor, quien desesperadamente incó sus garras en tu piel en un intento vano por mantenerte a salvo.

Pero fuiste alejada de tu hogar por las corrientes más feroces, sufriendo probablemente el suceso más traumático de toda tu corta vida... El cual afortunadamente no recordarás. No está de más aclarar que sufriste lesiones incontables, desgarrada por espinas y golpeada por firmes rocas que no se inmutaban ante el paso del agua, sufriste al llegar el anochecer una contusión en la cabeza de tal magnitud que quedaste inconsciente al instante.

Tu cuerpo inherte fue transportado, para tu suerte, por los ahora mansos vaivenes que el agua ofrecía tras haberse calmado el diluvio, siendo ahora decisión del río el qué sería de ti.

???:
Quien sabe si fueron horas, días o semanas. Despertaste confundida y asustada en el medio de un claro que desconocías por completo, rodeada de cerros y bosques. Todo era nuevo para ti otra vez, mas era diferente, una sensación incómoda, pronto caiste en cuenta que no lograbas recopilar absolutamente nada de lo anteriormente ocurrido.
Ni tu nombre, ni tu edad, ni tus padres, ni amigos, la angustia te consumió pero el hambre te empujó a seguir a través de éstas tierras desconocidas que ahora se ponían a tu disposición para ser exploradas.

Es entonces el comienzo de tu nueva vida.

Se puede decir que te instruiste sola y con éxito, superaste la soledad al instante en que manchaste de sangre tu hocico y calmaste tu apetito. Las lunas dentro del aislamiento en el claro terminaron forjando en ti una personalidad fuerte y feroz, mas el anhelo por la compañía de alguien más punzaba cada día a todas horas, siendo algo que nadie podría enseñarte a superar.

Sin saberlo habías cumplido tus 14 lunas y por ende tu entrenamiento como guerrera.

Guerrera:
Fue una luna más tarde que decidiste expandir tus horizontes, los bosques, el cerro y lo que hubiera más allá permanecía desconocido para ti, cosa que no duraría por mucho.
Comenzaste tu viaje con timidez y precaución, pero por más pulcros que fuesen tus pasos fuiste sorprendida más de una vez por animales locales y sonidos inesperados.
Éste viaje tuyo es una de las pocas cosas que aún recuerdas, y agradeces con todo tu ser, pues sería parte del gran cambio que estaba tomando lugar en tu vida

A tus 17 lunas tuviste tu primer encuentro en mucho tiempo con otro felino, digamos que no muy amigable. Resulta que inconscientemente habías cometido el gravísimo error de entrar en territorio prohibido... Pero por qué? El gato que te confrontó pronto aclaró tus dudas al arrastrarte a lo más profundo del campamento, un clan funcionaba en las cercanías, y tú estabas robando sus presas día a día.

Una vez dentro fuiste bombardeada por brillantes ojos prejuiciosos pertenecientes a felinos que probablemente pensaban en la forma más retorcida de hacer justicia por mano propia, mas no tenían permitido llevar a cabo sus pensamientos, serías juzgada por el líder del clan y su lugarteniente. Claro que no sabías nada de esto, pues hacía mucho habías olvidado lo que era pertenecer a un Clan.

Fue evidente entonces para todos los presentes en el juicio que tu ignorancia e inconsciencia te hacían inocente, o al menos así lo decidió el líder, Estrella del Sur en ese entonces. Gracias a tu estado confuso se te fue dada una segunda oportunidad, únicamente como servidora al Clan del Camino.

Pero a pesar de tu forzoso comienzo como miembro de la comunidad, haces tu mejor esfuerzo para que las miradas intrusas comiencen a familiarizarse con tu presencia.

Fuiste en esta etapa de tu vida, nombrada como "Vuelo Perdido" debido a tu confuso pasado.

Líder:
Una vez aceptada en el clan y ganada su confianza, tu desenvoltura con tus pares pronto evolucionó. Aprendiste a ser amable y ver por el otro, dejaste el egoísmo en tu pasado e hiciste amigos donde jamás te habrías imaginado. Tu desempeño fue tal, que no tardaste en escalar rangos a medida que tu edad avanzaba y sin habértelo esperado llegaste a ocupar el puesto de Lugarteniente en un tiempo envidiable.

Mas estabas feliz en tu posición, el trabajo que desempeñabas era digno de orgullo para la mayoría y celos para algunos. Rogabas entonces que aquellas épocas no acabasen, pero así lo hicieron de todas formas.

Es inútil detallar los hechos que te guiaron ciegamente a donde te encuentras ahora, Estrella del Sur se retira debido a su avanzada edad, y es entonces cuando llega tu ascendencia, tu legado.

Tomas el Liderazgo del clan con 26 lunas recién cumplidas, y aún sigues en el cargo, desempeñándolo con esfuerzo hasta el día de hoy.

Personalidad:

Comprensible:
Dispuesta:
Leal:
Justa:

Indiferente:
Seria:

Rencorosa:
Paranoica:
Fácil de ofender: